Esta gigantesca flor amarilla con forma de sol es originaria del continente americano, concretamente de Perú. Se trata de una planta anual de gran tamaño, pudiendo alcanzar los 6 metros de altura. Las variedades enanas que no superan los 40 centímetros de altura son las más solicitadas para el cultivo doméstico de esta planta con flor.

Las semillas de girasol, popularmente conocidas como ‚Äúpipas‚Äù, contienen generosas cantidades de minerales (como potasio, calcio, fósforo, magnesio) y ácidos grasos.

Beneficios del consumo regular de las semillas de girasol. 

• Favorecen la circulación sanguínea. Los ácidos grasos presentes en las pipas tienen propiedades medicinales que ayudan a reducir el riesgo de padecer problemas cardíacos, circulatorios y cardiovasculares (como podrían ser, por ejemplo, los infartos de miocardio).

• Son un complemento alimenticio ideal en la dieta de los deportistas. El magnesio y el potasio son componentes indispensables en la alimentación de las personas que entrenan profesionalmente o como afición. Las semillas de girasol contienen estos elementos, por lo que es bueno comerlas durante trabajos que demanden un gran esfuerzo físico. 

• Estimulan el funcionamiento cerebral. Debido a su alto contenido de fósforo y magnesio, las semillas de girasol nos ayudan a mejorar la memoria, la concentración y el rendimiento mental en general.

• Muy buenas para embarazos. El ácido fólico que contienen las pipas es muy bueno para las mujeres embarazadas en etapa de lactancia, siendo muy bueno para que el bebé pueda formarse bien y la madre no se debilite.