Originaria de Europa y Oriente Próximo, la retama negra es un arbusto que puede llegar a los 2 m de altura. Esta planta medicinal tiene una vigorosa raíz central, un tallo verde y estriado a lo largo, duro, con ramas fuertes y flexibles. Sus pequeñas hojas de color verde son caducas, pecioladas, las superiores sésiles. La época de floración es desde hasta julio, dependiendo de la altitud en la que se encuentre. Sus flores son de color amarillo luminoso, su forma recuerda a las mariposas. Las semillas se encuentran en las vainas aplastadas de color negro, con doce semillas en su interior.

Propiedades medicinales de la retama y sus principales utilidades

Este arbusto contiene un alcaloide líquido, espeso y amargo denominado esparteína. Además también encontramos otros dos alcaloides en menor concentración, la serotonina y la genisteína. La cantidad del alcaloide principal varía según la época del año en la que se realice el análisis En noviembre y en febrero es cuando la planta está más estable, a partir de marco se empieza crecer hasta la época de máxima floración. Además de los alcaloides también contiene glucósido y algo de melanina en los frutos. La medicina natural utiliza sus flores para fines diuréticos, lo cual es muy bueno como antiedematosa.

Las flores de la retama negra se usan en la medicina tradicional. Debido a sus numerosas cualidades, el cultivo doméstico de este arbusto es muy aconsejable. Definitivamente se trata de un buen complemento y alternativa a la medicina farmacéutica. En todo caso, debemos consultar con un médico especialista antes de usar medicamentos caseros.

Con las flores de la retama negra, podemos preparar:

• Cataplasmas

• Infusiones

• Vino medicinal

• Decocción